Explosión en unos grandes almacenes de Taichung: Se confirma que la causa es una fuga de gas

Concluye la investigación, que pone de relieve la negligencia y las devastadoras consecuencias en Taiwán.

Taichung, Taiwán – Un informe oficial de la investigación de incendios ha confirmado que una fuga de gas fue la causa de la devastadora explosión en los grandes almacenes Taichung Shin Kong Mitsukoshi el mes pasado, que resultó en cinco muertes.

El Departamento de Bomberos de Taichung, en un breve comunicado emitido hoy, anunció la conclusión de su investigación sobre la explosión del 13 de febrero. El departamento especificó que la explosión fue provocada por una fuga de gas, pero no publicó el informe completo, indicando que se presentaría a los fiscales para un examen más detallado y una posible acción legal.

La evidencia clave recopilada en el lugar incluyó colillas de cigarrillos, cables eléctricos, una tubería de gas y una sierra circular. Fuentes familiarizadas con el asunto revelaron que la fuga de gas probablemente se originó en un proyecto interno dentro de los grandes almacenes.

Los grandes almacenes habían contratado a Shin Chung Natural Gas Co. para cerrar el suministro principal de gas debido a cambios de diseño planificados. Sin embargo, se sospecha que quedó gas residual en las tuberías de la sucursal, que no fueron purgadas antes de comenzar la construcción.

Según fuentes, el gas acumulado se encendió cuando una amoladora, utilizada para cortar las tuberías, generó chispas, causando así la explosión.

Los fiscales están investigando actualmente el incidente como un caso de homicidio por negligencia, negligencia que resultó en lesiones y peligro público.

La explosión ocurrió en el piso 12 de los grandes almacenes de Taichung, que estaban en construcción y cerrados al público en ese momento. Las imágenes de video capturaron la catastrófica explosión, mostrando escombros siendo expulsados del edificio y esparciéndose por las calles de abajo.

Trágicamente, las víctimas incluyeron a una familia de siete miembros de Macao. Los abuelos perdieron la vida en la explosión, y una niña de dos años, inicialmente en estado crítico, sucumbió más tarde a sus heridas después de ser trasladada en avión a Macao, lo que elevó el número total de muertes a cinco.